Breve historia del calzado

Las zapaterías de marca del Barrio de Salamanca de Madrid saben muy bien que un buen calzado marca la diferencia. ¿Conoces cuáles son los orígenes del calzado? Pues lo primero que te vamos a contar es bastante curioso, ya que hace referencia precisamente a esa distinción que es capaz de crear un buen zapato.

La importancia de vestir los pies está latente en las zapaterías de marca del Barrio de Salamanca de Madrid. Los primeros calzados usados en las civilizaciones antiguas no solo eran un medio para protegerse los pies, también eran una manera de señalar las diferencias entre las clases sociales. En Egipto, por ejemplo, únicamente el faraón y sus dignatarios tenían permitido el uso de calzado. En Grecia, su uso estaba reservado solo a los hombres libres. En Roma, en cambio, aunque los esclavos iban descalzos, los delincuentes eran castigados con incómodos zapatos hechos de madera.

En la Edad Media se le empieza a dar otro valor diferente al calzado. Se aprecia la importancia estética que puede aportar a la figura de quien lo lleva. En ese momento, se empieza a llevar tacones, por ejemplo, para disimular la baja estatura de reyes o mandatarios.

Después, con la Revolución Francesa en el siglo XVIII, se vuelve a buscar la comodidad como característica esencial del zapato. Y en el siglo XIX, con una industria mucho más desarrollada, se crean nuevas formas de fabricar muchos modelos diferentes. Precisamente en esta época, sobre los años 30, aparece el calzado Oxford en Escocia e Irlanda. Y no podemos olvidar que el hecho de poder encargar unos zapatos a un artesano era aún un signo de distinción social.

Cómo se desarrolló el mundo del calzado en adelante es una historia que más o menos conocemos. Ahora toca disfrutar de los mejores zapatos en Tubet, donde también marcamos la diferencia con las mejores marcas.